Cuando llegamos la habitación no tenía internet, amablemente nos la cambiaron, sin embargo las sábanas estaban sucias y el lugar dejaba mucho que desear. Pedí sábanas limpias, y por ser educado dije que si querían las cambiaba yo, la chica dijo que está bien, aunque ese debería ser su trabajo. Sobre la habitación en si, el baño estaba lleno de manchas de humedad, el espejo igual sucio, el piso lleno de manchas. Las almohadas al quitar las fundas también sucias etc... Un desastre vaya. Y para terminar de estropearlo todo pásamos una noche fatal, la ventana no aisla nada de sonido, todas las noche escucharás los coches y pitidos de afuera, ideal si te apetece un poco de dolor de cabeza. Para colmo nuestros vecinos de habitación, tuvieron sexo casi toda la noche, y si no bastaba con escuchar a la mujer gemir a las 2/3/4 de la mañana , lo combinaron con golpes en la pared el resto de horas. Añadido a la lista de peores hoteles de Veracruz. Lo único que diré positivo del lugar es que la recepcionista fue amable. Todo lo demas Fatal
