Hemos estado 15 estupendos días en este rincón de paz, en el cual, todo ha sido perfecto. Un 10 a la comunicación con la propietaria Pilar (un estupendo ser de luz) que nos ha hecho muy grata nuestra estancia. Se ofreció voluntariamente a cuidar de mi madre que tiene poca movilidad con el fin de que nosotros pudiésemos disfrutar de la playa, que está a pocos minutos en coche. Aunque también se ofrece para cuidar a niños, pues tiene mucha mano con ellos.
El jardín nos ha encantado, siendo un lugar con mucha sombra para estos días calurosos y con una gran mesa que hace posible unas estupendas comidas y veladas con la familia o amigos.
También hay que destacar la piscina, que aún siendo comunitaria, es muy tranquila, habiendo tenido muchos días en los que hemos estado solos en ella. Y está muy cercana a la casa.
Además, la casa dispone de todos los utensilios necesarios para la vida cotidiana; tostadora, exprimidor, microondas, lavavajillas, horno, sartenes, ollas, y un largo etc. Y un wifi excelente.
Os encantará !!!
Muchas gracias Pilar por todos tus consejos y todas tus palabras. Eres una persona excepcional !!! Volveremos a verte